El agua es absolutamente necesaria para la vida, los seres humanos dependemos de ella, sin ella el medio ambiente se destruiría de forma irreversible. Por esto, su escasez pone en peligro nuestra especie y la de todos los seres vivos que conocemos, porque existen organismos pueden sobrevivir sin aire, pero ninguno puede existir sin agua, nuestro cuerpo está constituido en un 75% de agua,
La contaminación convierte al agua inutilizable para el consumo y uso que normalmente le damos, además de dificultar la subsistencia de especies más ligadas y dependientes de esta, teniendo en cuenta que no tienen la posibilidad humana de depurar o filtrar las impurezas.
En los últimos meses en Colombia y muchas partes del mundo estamos sufriendo una prolongada sequía por la falta de lluvias, por lo cual las reservas de agua (Lagos, Ciénagas, Ríos, Etc.) hayan bajado notablemente su nivel, el caudal del rio Magdalena por ejemplo ha disminuido considerablemente, lagos se han secado, destruyendo el ecosistema que lo habitaba.
Teniendo en cuenta que cada uno de nosotros consumimos en nuestras casas muchos litros de agua al día, si queremos seguir disfrutándola como hoy lo hacemos, debemos de ser conscientes de este problema y tratar de usarla correctamente y no contaminarla. El cuidado del agua no debe ser solo una problemática tratada por los países, gobernantes y entes protectores, cada uno de nosotros puede hacer algo para proteger el lugar que habita, por muy pequeñas que parezcan las acciones, todo suma. Es más bien cuestión de compromiso, para mejorar nuestros hábitos de consumo, y del correcto aprovechamiento de esta, evitando también acciones que puedan contaminarla.
Pero, ¿cómo podemos contribuir a los problemas del agua que se generan? Sabemos dónde gastamos el agua, qué hábitos fomentan un uso racional y cómo nos ayudan algunos productos a obtener un gran ahorro. Consumirla responsablemente para no perjudicar al planeta es cosa de todos. los “compromisos” pueden ser acciones tan sencillas como: No dejar la llave del agua abierta mientras no cepillamos los dientes y hacer un uso responsable del agua; No regar las plantas en exceso, ni lavar el carro tantas veces en un mes; para evitar su contaminación es fundamental el correcto proceso para las basuras, no arrojarla a los arroyos, ni lanzarla a los ríos o a orillas de las reservas de agua; nos sirve también usar productos amigables con el agua, no utilizar demasiado detergente o cloro al lavar la ropa, darse duchas un poco más cortas, entre muchas otras costumbres que podemos adoptar.
El reutilizar el agua es una solución que implica un poco más de esfuerzo y consideración, pero es una de las formas más efectivas de ahorrar agua, teniendo en cuenta que el agua es un recurso renovable pero no infinito, existen gran variedad de organizaciones que enseñan muchos hábitos y consejos para cuidar no solo el agua sino todo el medio ambiente, aunque yo se que no es falta de conocimiento sino de conciencia.
La solución somos todos, si todos ponemos de nuestra parte y nos comprometemos con este recurso, se que se mitigaran en gran forma los daños ocasionados hasta ahora, por los hábitos de consumo acelerados y un desagradecido uso y trato al agua.
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